Esta es una publicación de Adrián Campos, periodista y editor mexicano especializado en Tecnologías de la Información, Redes Sociales y Negocios. Actualmente colabora en medios como Techtarget.com, en su edición en español y Negocios en Imagen, así como varios programas de TV y radio.
La normalidad que vivíamos antes de la pandemia por Covid -19 se ve más cercana, el volver a tener contacto físico con la gente ya es parte de nuestra vida otra vez, y muchas empresas han optado por volver a las oficinas al 100%. Aunque parece que esto es una idea arcaica, pues los números de productividad de las empresas que implementaron home office demuestran lo benéfico que fue para el empleado trabajar de esa forma, siempre y cuando se le dotara de la tecnología y herramientas para llevar a cabo sus labores.
Desgraciadamente, vivimos en una cultura en la que uno de los paradigmas más grandes es creer que ser productivo es estar sentado en una oficina. Aunque esto, sin duda alguna, es un dogma erróneo. Esto queda de manifiesto con las cifras obtenidas por el reciente estudio de Citrix “Work Rebalanced”, pues de acuerdo con ellas, el empleado se siente con mayor compromiso con aquella empresa que le permita trabajar en forma remota gran parte de la semana y parte en la oficina, pues considera que pueden alcanzar un mayor nivel de bienestar laboral.
Sin embargo, el empleador no siempre entiende la importancia que ahora la gente da a un entorno laboral híbrido que le permita lograr un equilibrio personal y profesional, y aun así, el 34% de los líderes no ofrece ningún tipo de flexibilidad para tener un entorno laboral híbrido, un 28% exige la asistencia de tiempo completo a la oficina, por lo que es posible que no entiendan los beneficios de este tipo de trabajos.
El trabajo híbrido, aporta muchos beneficios a los empleados, por ejemplo, en urbes de la región Latinoamericana con un tráfico caótico como los son Ciudad de México y su Zona Metropolitana, Bogotá o Sao Paulo, el empleado deja de perder tiempo de su vida en el tránsito que puede usar en actividades que le proporcionen un mayor equilibrio laboral – personal.
En el caso de la capital mexicana estos tiempos pueden llegar a ser de hasta 3 horas en auto o 4 en transporte público; este tiempo muchos empezaron a aprovecharlo para poder desarrollar una rutina que se complementara con su labor, como el desayunar de forma tranquila, hacer ejercicio o convivir con su familia, ayudando a la salud mental y física.
México es el país miembro de la OCDE en el que la gente trabaja más allá de 40 horas a la semana, pues antes de la emergencia sanitaria los mexicanos que asistían a oficina laboraban un promedio de 2, 124 horas al año, un promedio de 48 horas a la semana, eso sin contar el tiempo de traslado al lugar de trabajo.
El caso mexicano es el ejemplo de que tiempo de más en la oficina no es sinónimo de productividad, pues a pesar de lo larga que llega a ser la larga jornada, el empleado no genera más, ya que en promedio un empleado mexicano generaba a la empresa 21.6 dólares por hora trabajada, algo ínfimo si lo comparamos con Irlanda que cada hora del trabajador equivalía a 100 dólares.
Después de ver estos datos no es de extrañar que 31% de los empleados cambiaría de trabajo trabajo si le ofrecieran elegir la modalidad que prefieren para ser productivos, esto de acuerdo con cifras obtenidas del estudio “Regreso a la oficina 2022” realizado por OnePoll en nombre Citrix, es por ello importante que los empresarios empiecen a tomar más en serio los deseos del empleado de poder realizar sus labores dónde estos se sientan más cómodos. Y de no encontrar las condiciones piensan seriamente en renunciar, y unirse a así a la tendencia global que se ha denominado “La Gran Renuncia”, en México ese fenómeno se ha concentrado en los perfiles ejecutivos, en especial los mandos medios.
Para darnos una idea del impacto que ha tenido “La Gran Renuncia” basta con ver la última Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) del INEGI, de dónde podemos desprender que de los casi 2 millones de personas en edad productiva que se encuentran desocupados, el 27% renunciaron a su empleo por diversos factores. Algunas de las razones que se han dado para que los mexicanos dejen su trabajo van desde el estrés laboral, excesiva carga de trabajo, falta de comunicación, poco reconocimiento, etc., todo esto hace que la gente se cuestione si es más importante el ingreso económico que lo personal. Como vemos, parte de encuesta del INEGI muestra como uno de los factores para renunciar es la falta o mala comunicación, el estudio de Citrix: Work Rebalanced también refuerza esta postura, pues más de la mitad de los empleados (55%) consideran que una de las tres cualidades más importantes del panorama laboral post-pandemia deben ser las habilidades de comunicación del empleador, por encima de cualidades como creatividad, la habilidad técnica y delegar no son calificadas como muy altas por los empleados.
Para poder interactuar de mejor manera con sus empleados en los nuevos tiempos que han dejado el trabajo remoto e híbrido, los lideres han tenido que hacer cambios en su forma de comunicar, ya que no solo es la manera de hacerlo, es la tecnología y el mensaje que con ello se da. La tecnología debe jugar un papel importante en esta parte, ya que gracias al video podemos tener las reacciones faciales que pueden hacernos sentir más cerca de los compañeros de trabajo, y gracias a esto también podemos generar una comunicación efectiva y sensible, lo que para los empleados es un factor clave, ya que puede generar mayor empatía, algo que 28% de la gente considera esto como uno de los mayores atributos del liderazgo.
Para lograr desarrollar el trabajo remoto o híbrido, se requiere espacio y disciplina, y es gracias a la tecnología que muchos en esta nueva normalidad laboral encuentran oportunidad de ser igual de productivos que los más experimentados, así que el 77% de los mexicanos considera que el uso de tecnología sofisticada les da igualdad de productividad.
Durante la pandemia, gracias a los tiempos libres que se lograron al adecuarse al trabajo híbrido y home office, mucha gente empezó a tomar cursos y a crear las llamadas softskills, y muchos mexicanos (86%) creen que la tecnología les ha permitido actualizar sus conocimientos y nuevas competencias, algo que también el notan los líderes, pues el 73% de ellos creen que la tecnología ayuda a los empleados nuevos o más jóvenes a lograr una competencia y eficacia laboral más rápidas.
Finalmente, y lo dejo al final, porque, aunque es muy obvio, la tecnología ha permitido que el trabajo hibrido y remoto sean posibles, siendo el eje principal para poder lograrlo. No obstante, el estudio de Citrix: Work Rebalanced, demuestra que los empleados pierden alrededor de 54 minutos por día debido a desafíos tecnológicos como la restauración de archivos perdidos y el restablecimiento de contraseñas olvidadas.
Por ello es importante que existan herramientas tecnológicas para permitir que los empleados trabajen y colaboren en cualquier momento y en cualquier lugar. Si algo aprendimos durante la pandemia, es que mantener la productividad es vital para una empresa, en ocasiones errores una gran cantidad de caídas en los procesos tecnológicos y que paren la empresa, puede ser la diferencia entre el éxito del negocio o sus pérdidas
Es por eso que, hoy más que nunca, y ante el entorno desafiante no solamente de la competencia, también de las necesidades del empleado que trabaja de forma hibrida o remota, es importante invertir en sistemas que simplifiquen y automaticen las cargas de trabajo y considerar la colaboración digital y la tendencia DaaS (Device as a Service), que no es más que una solución de cloud computing que ofrece escritorios virtuales alojados en la nube en cualquier dispositivo de los usuarios, basta que haya una conexión a Internet. Con DaaS por suscripción las empresas pueden tener en sus manos infraestructura completa de TI con activos de hardware actualizados y en correcto funcionamiento, que les ofrezcan bajo costo de equipos, reducción de costos con bienes de capital, flexibilidad y personalización, pero sobre todo seguridad de la información.
Así, con este panorama, las empresas podrán generar esos entornos laborales adecuados, para no engrosar las cifras de “La Gran Renuncia”.